¿BUENA SUERTE? ¿MALA SUERTE? ¡QUIÉN SABE!
¿BUENA SUERTE? ¿MALA SUERTE? ¡QUIÉN SABE! “Una historia china habla de un anciano labrador, viudo y muy pobre, que vivía en una aldea, también muy necesitada. Un cálido día de
¿Alguna vez en tu vida escuchaste lo siguiente: “Cuento hasta tres para ver todo recogido y ordenado”? (me parece escuchar la voz de mi abuelita jajaja)
¿Y alguna vez te has preguntado cuál es la razón por la cual muchas personas no logran ordenar sus espacios?
¿Y porque le sucede a algunos miembros de la familia y a otros no aún formados con las mismas normas y hábitos?
En términos generales, el desorden en los espacios que habitamos es un reflejo de la des-organización de nuestro mundo interior (Como es adentro es afuera –> Principio Universal) y como ya te he contado antes, la casa nos habla y quiere darnos pistas sobre lo que está pasando en nosotras, lo cual, si se interpreta adecuadamente su lenguaje, nos va a facilitar el camino para nuestra transformación personal.
Si nuestra casa está saturada de objetos, significa que nosotras estamos saturadas de ideas y de proyectos sin resolver: Nos habla acerca de nuestra confusión interna y falta de estructura.
Te contaré acerca del significado que se esconde detrás del desorden de acuerdo al lugar en el que se encuentra y así entenderás fácilmente su influencia y la importancia de tomar acción:
Recuerda que nuestro cerebro va creando nuevas rutas neuronales de acuerdo a la información que recibe del entorno y va grabando en nuestros recuerdos:
Y todo esto se produce por los objetos, colores, texturas, formas y aromas que hay en nuestros espacios, cobrando un papel importante, pues son claves para construir un ambiente sano, equilibrado y de bienestar.
Normalmente asociamos a nuestra salud, lo que comemos, cómo dormimos, si nos ejercitamos o no, si meditamos, las emociones, pero pocas veces nos detenemos a pensar el efecto que está produciendo el entorno en nosotras.
Un desequilibrio en nuestro cuerpo traerá estancamiento y si se descuida, se va a manifestar físicamente a través de una enfermedad. En nuestros espacios esta energía estancada, que no fluye, comienza a afectar los distintos aspectos de la vida: no poder encontrar trabajo o no disfrutar el trabajo que tenemos, problemas en las relaciones con otras personas (pareja, hijos, otros), disminución del flujo de dinero, proyectos sin desarrollar, entre otros.
Ahora, todo esto que te cuento no es ni bueno, ni malo, es simplemente una guía que te ayudará a revisar qué aspectos de tu vida son viables de mejorar y en esa misma medida tu casa irá tomando un nuevo aspecto que te represente mejor como lo que eres ahora, en tu presente.
Tampoco se trata de que gastes toda tu energía pensando en cómo resolver el desorden, simplemente basta con crear algunos hábitos que hagan que tu espacio sea un lugar fácil de manejar. Comienza por salir de la mayor cantidad de objetos que no usas y que no te gustan, este es un gran primer paso: menos objetos = menos caos (y menos polvo que limpiar).
Te deseo una linda semana!!!
Monica Chacón Rojas
Asesora en Armonización de Espacios
¿BUENA SUERTE? ¿MALA SUERTE? ¡QUIÉN SABE! “Una historia china habla de un anciano labrador, viudo y muy pobre, que vivía en una aldea, también muy necesitada. Un cálido día de
Lo que dice el desorden según el lugar de tu casa. ¿Alguna vez en tu vida escuchaste lo siguiente: “Cuento hasta tres para ver todo recogido y ordenado”? (me parece escuchar la
La acumulación de cosas o “Desorden” se relaciona con diferentes clases de miedos, como miedo al cambio, a ser olvidado o a olvidar y a la carencia. Además de los
En occidente, hemos vivido desconectadas de nuestra corporalidad y emociones, pero muy conectadas con el mundo de las ideas. Nuestra cultura ha valorado más la productividad proveniente del mundo exterior
… Estoy segura de que NUNCA, NUNCA, pero NUNCA más volverás a ver tus espacios de la misma manera que hasta ahora. Tu casa está VIVA y es tan protagonista
¡Los seres humanos somos criaturas maravillosas! Nuestro cuerpecito es formado al ritmo de los sonidos del interior de nuestra madre. Al rededor de las 18 semanas de gestación, nuestro canal